LAUDO PREMIACIÓN 28 CONCURSO DE ARTE EDUARDO LEÓN JIMENES

El jurado del 28 Concurso de Arte Eduardo León Jimenes reconoce la complejidad de los tiempos en que se celebra esta edición; la dedicación, perseverancia y tenacidad de los artistas; el compromiso del equipo del Centro León y el empeño institucional en continuar con la celebración del evento, pese a las condiciones adversas, y promover el apoyo a las artes en momentos en los que es más necesario que nunca.

La exposición de estas obras en el 28 Concurso de Arte Eduardo León Jimenes permite y fomenta la reflexión sobre múltiples temas, activa el pensamiento crítico en torno a éstos y potencia el rol del arte como articulador de relaciones sociales y una política de los afectos.

El jurado decidió unánimemente otorgar un premio editorial y 3 premios igualitarios.

Se entrega el premio editorial que consiste en la entrega de fondos al artista para su uso en fines editoriales a una obra que:

Crea una especie de memorabilia híbrida que hace referencia a una historia olvidada, a una identidad indígena que nunca fue y a un sustituto colonial que a través de los siglos ha determinado una estética particular cargada de dilemas políticos e ideológicos.

Una aproximación minuciosa le permitió a la artista acercarse a los objetos no solo desde su materialidad y simbolismo, sino también desde sus propias jerarquías en el lenguaje cultural y posibles -e imposibles- vínculos con otros objetos.

Esta obra confronta el racismo práctico y el ideológico al utilizar los imaginarios usuales y confrontarlos con la extrañeza de su mezcla.

Los materiales y simbologías utilizadas y combinadas son metáfora y paradigma de culturas fundacionales, pero también de clichés culturales que afianzan las desigualdades y polaridades binarias.

De una manera inteligente y lúdica la artista logra crear este sincretismo arqueológico que permite acercarnos a nuestra historia y nuestros conflictos de identidad como nación, desde una óptica holística y reconciliadora.

De Julianny Ariza Vólquez: Atesoro.

Un premio igualitario se otorga al cuerpo de obra:

Que reafirma que lo personal es público y eventualmente político.

Un cuerpo de obra que logra conjugar de una manera poética y armoniosa grandes dilemas que vinculan lo íntimo y lo colectivo a un tiempo.

Este trabajo, construido con rigor y delicadeza, logra traer al presente una microhistoria que trasciende el orden privado de la memoria para mostrar asimismo un capítulo del urbanismo residencial en Santo Domingo.

La artista recupera a través de redes familiares olvidadas y emociones descartadas de espacios que desaparecieron, algunos segmentos de la cultura material y facilita un pacto y compromiso con la memoria crítica.

Partiendo de lo escultórico que se corporeiza como piezas que toman forma de animales fantásticos, esta obra nos permite un atisbo hacia el ejercicio de una artesanía reparadora que se encuentra encapsulada en la historia de muchas comunidades.

De Guadalupe Casasnovas: Fauna extinta del ensanche Piantini y Sitio arqueológico e histórico de la Calle 12 # 24

Un premio igualitario se otorga a la obra:

Con la que se reflexiona sobre la construcción de la historia, la racialización de los relatos y las identidades ideológicas de los “bandos” polarizados en los conflictos sociales.

El resultado es visualmente sugestivo por su juego entre ficción e historia, entre verdad e ideología. Destacamos la función descolonizadora del trabajo, y, en especial, su rescate del papel desempeñado por la población esclavizada africana en la historia de la República Dominicana.

Esto resulta de gran importancia debido a la persistencia en el país de una mentalidad que niega y pretende ocultar en forma sistemática el importantísimo impacto de África en la etnogénesis y la cultura dominicanas.

El artista muestra un manejo conceptual muy preciso (y pertinente) de la fuente primaria del pasado que disparó su narrativa.

La operación de trasladar el episodio de un discurso histórico marginalizado y oblicuo a los relatos oficiales que sirven de marco para la pieza, generan un novedoso dialogo sobre el archivo.

El artista logra, desde una técnica impecable y una investigación meticulosa, que reflexionemos no solo sobre los huecos en el pasado histórico, sino que nos replanteemos las prácticas corruptas y clientelistas en nuestro presente.

De José Morbán: Monte Grande/Paramnesia

Un premio igualitario se otorga a:

Un proyecto multidisciplinario, complejo y con densidad semántica.

Dar vida hoy al Hotel Mercedes es una acción subversiva y movilizadora porque vuelve evidente un patrimonio en riesgo que pone en juego la crónica afectiva de su contexto.

La obra, a través de su semántica de edificio viviente, que respira, también obliga a confrontar la conservación del legado arquitectónico y a evaluar críticamente nuestro patrimonio vigente, restaurado, que favorece la forma sobre los contenidos.

Muestra las preocupaciones por los espacios urbanos con carga simbólica y psicológica asociados con la vida social y comunitaria.

La obra revela una edificación que en su estado actual de deterioro sugiere sentimientos de desolación, vacío o melancolía y como tal es activada a partir de recursos y efectos que evocan su historia, cambios sociales, económicos, domésticos, y habilita la empatía cívica entre quienes se interrelacionan en su entorno.

Su activación no solamente suscitó una actividad inusitada en los alrededores de su emplazamiento, sino que generó un debate en relación con el patrimonio histórico, la accesibilidad y la propiedad de la memoria.

El artista remueve la idea de los espacios privados donde habita la memoria pública y motiva a que sean reconocidos en su carácter colectivo.

De Raúl Morilla: Agonía de la memoria

Firmado en Santiago, República Dominicana, Madrid, España y Nueva York, Estados Unidos.
Gerardo Mosquera Fernández, Gabriela Rangel, Raquel Paiewonsky y Sara Hermann

13 de abril, 2020

Buenos Aires, Argentina; Madrid, España; Santiago y Santo Domingo; República Dominicana.

Entre los días 24 de marzo y 13 de abril del 2020, el Jurado del 28 Concurso de Arte Eduardo León Jimenes, conformado por Gabriela Rangel, Gerardo Mosquera, Raquel Paiewonsky y Sara Hermann efectuó una revisión de los proyectos de los artistas presentados a dicha convocatoria.

Luego de estas sesiones que abarcaron procesos de evaluación de proyectos y deliberación, el jurado seleccionó un total de 20 artistas o colectivos según lo establecido en el Capítulo V, Artículo 7 de las bases del Concurso.

El jurado considera que los trabajos y tácticas de estos artistas permiten, desde el lenguaje internacional del arte y en el contexto dominicano, abordar distintas problemáticas actuales. Reflexiones tales como la configuración y maleabilidad de la memoria y las ataduras de lo nemónico a los sitios que se habitan o transitan.  En este tenor, algunos artistas exploran los lazos del cuerpo con el espacio psicosocial y las formas en que ocupa el paisaje.

En algunos artistas prima la idea de la construcción o reinterpretación de historias colectivas o íntimas. Se proponen recopilar fragmentos de relatos individuales y efímeros con la intención de dar nuevas lecturas y estructurar una memoria alterna. Igualmente, proponen una intención de búsqueda en los puntos ciegos de nuestra historia.

Al tiempo, algunos participantes se ocupan de la problemática de la representación en la cultura visual a partir de estereotipos y patrones de poder, dominación y jerarquías que se reproducen en distintos ámbitos de la sociedad. Otros, han propuesto visibilizar los modos en que las creencias y regulaciones sociales normalizan la apariencia, roles y función de los cuerpos. Así, abordan cuestiones como el cuerpo de la mujer y su lugar en las ficciones sobre el Caribe, la cultura negra, los roles asignados a los géneros y las posibilidades de reflexionar desde el cuerpo.

A la par, hay artistas que proponen re escenificar los patrones estéticos y puntos de vista para establecer conexiones entre el consumo, lo formal e informal y sus contextos. Es importante resaltar también aquellos proyectos que plantean evaluar el sistema institucional del arte desde el terreno de la educación, la interacción de sus comunidades y la gestación de archivos.

El jurado considera que la exposición pública de estas propuestas en el 28 Concurso de Arte Eduardo León Jimenes permitirá y fomentará la reflexión sobre los temas identificados y activará el pensamiento crítico en torno a éstos. El jurado también considera que debido a ello se facilitará uno de los objetivos del Concurso, potenciar el rol del arte como articulador de relaciones sociales.

Gabriela Rangel, Gerardo Mosquera, Raquel Paiwonsky, Sara Hermann